lunes, 6 de julio de 2009

Primera confesión

Hace 12 años, volvía de la facultad en el tren, llegue a mi estación y solo se podía ver el frio corriendo por el andén. Eso no me amedrento y pase por el baño, para ver que me ofrecía la noche…
Lo vi de espaldas parado frente al mingitorio no estaba mal, para ese momento y lugar. Me pare a su lado, abrí mi pantalón y saque mi pija tocándome hasta dejarla bien dura mientras él me miraba. Me temblaban las piernas, siempre me pasa y no es miedo, es adrenalina.
Luego de tocarnos por un largo rato, en medio del frio, las goteras del baño y el olor a orina reinante, decidimos salir del putrefacto lugar para buscar un lugar con menos exposición, (no está de más aclarar de que en un barrio y a las 2 am es fácil encontrar un sitio vacio y con sombras donde poder escupir toda la leche que se necesite escupir).
Y encontramos un túnel oscuro pequeño bajo las vías, un paso a nivel peatonal, perfecto lugar donde sacarnos la calentura y seguir camino cada cual a su casa, sin saber nuestros nombres pero sabiendo que los dos buscábamos lo mismo, sexo.
No tocamos, chupamos y gemimos como suele ser meritorio en esos momentos, como animales, como desesperados, como dos putos calientes, como dos animales homosexuales.
Acabo yo y unos minutos después mientras él se estaba masturbando, mientras él le pegaba con su puño cerrado a su abultado vientre con su pija dentro de su puño, mientras sus dos inmensos huevos colgaban y se movían sentimos pasos que se aproximaban con cierta velocidad y eran dos policías al grito de quietos!
En segundos me subí el pantalón, y salí corriendo al mismo tiempo mi acompañante de turno pero sin éxito ya que prendieron luces y tuvimos que bajando la cabeza disponernos a las preguntas y a la sorna propia del evento.
Yo con 18 años y mucha cobardía no pude hacerme cargo de mi sexualidad y lo acuse de intento de robo y abuso…..

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